[FIESTA POLEMICA]
El sábado pasado, hubo un evento de música electrónica en FATYCA. El alto sonido y su duración despertaron muchísimas quejas de vecinos.
Nadie durmió en Parada Robles y alrededores en la noche del sábado y mañana del domingo. La molestia fue tal que el caso pasó a mayores y terminó con denuncia policial. Fue una fiesta multitudinaria, con jóvenes que bailaron música electrónica hasta media mañana del domingo. El escándalo no tardó en llegar, los vecinos hicieron la denuncia e intervino la DDI de Zárate Campana y el fiscal Maraggi.
No solo fue música, según los vecinos podría haber consumo de drogas, algo típico en "las raves" que se repiten en muchas capitales del mundo. Este tipo de fiestas son caracterizadas por la extensión horaria y el consumo de drogas conocidas como de diseño que eleva la necesidad de beber agua, que hacen que se incremente la energía de los consumidores y se extienda en el tiempo la fiesta.
Aunque se reconoce que los estupefacientes forman parte de este tipo de fiestas, hasta ahora no habría constancia que se haya consumido drogas. Eso también lo afirmó el director de Turismo Roberto Simonetti, quién descartó de plano que este tipo de fiestas se vuelvan a repetir. "Esto de bueno no tiene nada", sentenció.
Simonetti reconoció que miembros del complejo lo fueron a ver para comunicarle sobre "una fiesta" aunque no le informaron sobre sus características. El funcionario afirmó que no necesitaban permiso municipal porque están habilitados, y elogió la predisposición de los organizadores con los detalles de la fiesta, ya que avisaron a los bomberos voluntarios, Corredor Americano por la seguridad vial, contrataron un seguro... "Hubo un problema de comunicación, no supimos las características finales de esa fiesta, fue un mal paso, habrá que dialogar para que no vuelva a ocurrir", reconoció.
Simonetti reveló además que vecinos de la zona de Parque Juraló lo llamaron en la mañana del domingo y él los guió de cómo proceder con la queja.
El suceso también tuvo correlato político. "Atento a que el desarrollo de ese tipo de fiestas constituyó una alteración al normal desenvolvimiento de sus rutinas a los habitantes circundantes, es que FE planteó el lunes en la sesión del HCD su total oposición a la organización de este tipo de eventos en áreas pobladas y que afectan a la comunidad toda", dijo el partido en un comunicado. En ese ámbito presentaron un pedido de informe al Ejecutivo municipal.
FE sostiene que estuvo reunido con los vecinos recabando información y manifestaron que es la segunda vez que se hace este tipo de fiestas, que en el destacamento no estaban informados de su desarrollo en FATYCA y que congregó a más de 4 mil personas.
Fue la primera (o segunda) "rave", y por sus consecuencias tal vez la última.
El sábado pasado, hubo un evento de música electrónica en FATYCA. El alto sonido y su duración despertaron muchísimas quejas de vecinos.
Nadie durmió en Parada Robles y alrededores en la noche del sábado y mañana del domingo. La molestia fue tal que el caso pasó a mayores y terminó con denuncia policial. Fue una fiesta multitudinaria, con jóvenes que bailaron música electrónica hasta media mañana del domingo. El escándalo no tardó en llegar, los vecinos hicieron la denuncia e intervino la DDI de Zárate Campana y el fiscal Maraggi.
No solo fue música, según los vecinos podría haber consumo de drogas, algo típico en "las raves" que se repiten en muchas capitales del mundo. Este tipo de fiestas son caracterizadas por la extensión horaria y el consumo de drogas conocidas como de diseño que eleva la necesidad de beber agua, que hacen que se incremente la energía de los consumidores y se extienda en el tiempo la fiesta.
Aunque se reconoce que los estupefacientes forman parte de este tipo de fiestas, hasta ahora no habría constancia que se haya consumido drogas. Eso también lo afirmó el director de Turismo Roberto Simonetti, quién descartó de plano que este tipo de fiestas se vuelvan a repetir. "Esto de bueno no tiene nada", sentenció.
Simonetti reconoció que miembros del complejo lo fueron a ver para comunicarle sobre "una fiesta" aunque no le informaron sobre sus características. El funcionario afirmó que no necesitaban permiso municipal porque están habilitados, y elogió la predisposición de los organizadores con los detalles de la fiesta, ya que avisaron a los bomberos voluntarios, Corredor Americano por la seguridad vial, contrataron un seguro... "Hubo un problema de comunicación, no supimos las características finales de esa fiesta, fue un mal paso, habrá que dialogar para que no vuelva a ocurrir", reconoció.
Simonetti reveló además que vecinos de la zona de Parque Juraló lo llamaron en la mañana del domingo y él los guió de cómo proceder con la queja.
El suceso también tuvo correlato político. "Atento a que el desarrollo de ese tipo de fiestas constituyó una alteración al normal desenvolvimiento de sus rutinas a los habitantes circundantes, es que FE planteó el lunes en la sesión del HCD su total oposición a la organización de este tipo de eventos en áreas pobladas y que afectan a la comunidad toda", dijo el partido en un comunicado. En ese ámbito presentaron un pedido de informe al Ejecutivo municipal.
FE sostiene que estuvo reunido con los vecinos recabando información y manifestaron que es la segunda vez que se hace este tipo de fiestas, que en el destacamento no estaban informados de su desarrollo en FATYCA y que congregó a más de 4 mil personas.
Fue la primera (o segunda) "rave", y por sus consecuencias tal vez la última.
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