Perdón maestro
[Por Andrea Besso de Di Yorio]
[Por Andrea Besso de Di Yorio]
El pasado viernes 24 de abril visitó nuestro pueblo el señor Antonio Carrizo, reconocida personalidad por su des-tacada trayectoria en los medios de comunicación, Agregado Cultural en España y sobre todo por su amplia cultura.
Este señor de 82 años, que generosa-mente vino a realizar una charla sobre la vida de Niní Marshall, fue recibido en el galpón de la estación... un lugar amplio y frío, con un público de alrededor de 30 personas…
¿Qué habrá pensado don Antonio?
Yo como cardalera de toda mi vida sentí vergüenza ajena, no correspondía el lugar... considero que sí es apropiado para otras manifestaciones artísticas, pero para «el maestro», como así lo llaman, sin duda que no.
¿Qué pasa, no se puede organizar un buen evento?
Si queremos que las futuras generaciones participen, organicemos con tiempo, difundiendo, entregando la follete-ria a término, en forma prolija, con invitaciones, etc., sino lo mas probable que sea un fracaso, como sucedió.
La forma de fomentar la cultura es estimular a la gente.
Con eventos realizados de esta manera solo provocamos el desinterés y la indiferencia.
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